Fama y amor 7: Pobre

Mis padres y yo vivamos en el mismo callejón en el que nos habiamos sentado a descansar el dia que tuvimos que abandonar nuestra casa.

Yo ya tenía 14 años y no había día que no recordara a Alex. Él tambien había tenido que vivir en la calle, a lo mejor le había pasado lo mismo que a mi familia, o lo mejor no…

 

Había días que sí comíamos y otros que no, ahora entendía por qué Alex siempre se comía la manzana con tanta prisa. Cuando vives en la calle, siempre tienes hambre, a veces mucha, otras veces no tanta, pero siempre tienes.

 

El invierno era la peor época del año, te podías congelar de frio por las noches, algunas, incluso durmiendo en el suelo mientras nevaba, una experiencia que no le deseo a nadie.

A veces iba a la salida del colegio y veia como niños y niñas salían de las clases mientras se quejaban del colegio, desearía tanto poder ir al colegio como ellos…

Pero no, desde que me nos quitaron la casa no volví a pisar la escuela, mis padres no tenian dinero para el material escolar, y, de todas formas, allí siempre sería un bicho raro por no tener casa.

 

Así es mi vida ahora, aburrida, fría y, a pesar de que tengo a mis padres, solitaria.